Guayabas o guavas al vino tinto. Salsa de guayabas para carnes

El otro día estaba en casa de un cliente que tiene dos árboles enormes de guayabas, o guavas en EEUU, llenos de frutos. Me preguntaron si me gustaban, y les dije que jamás las había probado.

La señora me dijo ¨cómalas así, sin pelarlas.¨ Y me gustaron, aunque la cáscara me dejó un sabor un tanto astringente y las semillas, son duras, casi tanto como las de los membrillos.

Tenían tanta producción que hasta en el freezer guardaban bolsas repletas. A mí me regalaron una bolsa de guayabas frescas y así me puse a investigar recetas.

La primera que pensé fue cocinarlas en vino tinto. Sin embargo, no encontré más que salsas de guayabas con vino tinto, para lo cual hay que licuarlas con agua, colar las semillas y utilizar la pulpa. Esta pulpa aguada se mezcla con extracto de caldo, pimienta, vino tinto, tal vez un poco de azúcar y sirve para acompañar carnes.

No obstante, me aventuré a hacerlas así como hice con los membrillos al vino tinto. Pero esta vez, aprendí la lección y saqué las semillas, lo cual es laborioso pero arrastrándolas con el pulgar, se hace más fácil.

Como verán, no es mucho lo que se rescata, pero al menos podemos dejar las cáscaras que son más blandas que las de los membrillos.

Volviendo al tema de los membrillos, ayer veía un video, con membrillos grandes, se los pela, se saca el centro de semillas y así algo queda, insisto, tienen que ser grandes.

A estas guayabas lavadas, cortadas de la foto anterior, las cociné con vino Cabernet Sauvignon, azúcar marrón y blanca (cuánto, no sabría decirles, porque yo voy probando, no nos gustan los postres muy dulces, digamos media taza mínimo), dos anises estrellados, un chorrito de esencia de vainilla y canela en polvo, dos cucharitas.

Las demás guayabas, les quité los tronquitos, las corté en cuartos, y licué con agua. Como ven, y para mi sorpresa, las semillas se desprenden enteras. De ese licuado, tomamos parte de él, con y sin azúcar según quien tomara, y el resto lo tengo en un tupper hermético en la heladera.

Aclaro, no es la famosa  ¨agua de guayaba¨ que se hace así pero con más agua, azúcar, limón, hielo. Mi idea es freezarla y usarla para el pollo, en salsa. Ya veremos........

Debajo, las guayabas en frasco, no hice más porque me resultó muy tedioso quitarle las semillas. Quedó muy rico, supongo que las comeremos tibias, con helado de vainilla o para acompañar como guarnición en Thanksgiving o Navidad.....