Esta receta es una variante del pan de yogur griego. La primera foto está sacada al exterior, como ven parece más amarillento que el de yogur pero yo creo que es por la luz natural que tenemos, tan extraña y afectada debido a los incendios terribles en California.
La textura es más densa que otros panes blancos, pero delicioso.
INGREDIENTES
2 1/2 tazas de harina común blanca. De fuerza o multipurpose
1 1/2 cucharita de té de levadura seca
1 cucharita de té de sal
3 cucharitas de té de azúcar
1 cucharita de té de baking soda o Bicarbonato de Soda.
Un chorrito de aceite vegetal o de maíz (de sabor liviano)
3 cucharadas gordas de ricotta
1 huevo
Agua tibia. Cantidad necesaria
En un bol mezclamos los ingredientes secos. Aparte mezclamos bien el huevo con la ricotta y el aceite.
Vertemos el líquido en la mezcla de harina. Vamos armando la masa y agregamos de a poco agua tibia hasta que logramos armar un bollo que no se pegotee.
Dejamos descansar no menos de tres horas, tapado.
Precalentamos el horno a 450o. Nos aseguramos que alcance la temperatura. Diría que una media hora está bien.
Luego lo amasamos para alisarlo, no mucho, le damos forma. Yo preferí hacerlo redondo y dejarle los dobleces abajo. Le hice unos cortes cruzados.
Lo ponemos sobre una fuente de horno con papel de horno (parchment paper) o aceite para que no se pegue. Dejamos descansar nuevamente, tapado, no menos de una hora. Yo lo cubro con una bolsa de supermercado, que quede suelta por arriba y ajustada a la fuente por abajo.
Cocinamos por 20 o 25 minutos hasta que se ve dorado y hueco al golpearlo.
Lo cortamos cuando esté frío.
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