Pan de arroz crudo y tomate

Este pan lo hice tal cual mi pan de arroz crudo fermentado, producto de mis dosas frustradas. Con la diferencia que esta vez sabría que el resultado estaría bien, no me refiero a la forma (se me torcieron un poco) sino a la miga y el sabor. En casa tuvo mucho éxito.

No les podré decir las proporciones porque lo primero que hice fue preparar la mezcla de arroz con agua (batter) y tomate. Digamos,  unas tres partes de agua por una o una y  media de arroz.

El arroz se deja en el agua por dos o tres horas, luego se agrega un tomate grande y se licua en la función más fina. Le agregué orégano.

Luego condimenté con sal, ajo en polvo y un poco de azúcar. Por otro lado tenía la harina multipurpose (de fuerza, o harina común) con una parte de harina integral de salvado (wheat) con tres cucharitas llenas de levadura (yeast) seca.

Agregué la mezcla de agua, tomate y arroz a la harina, e incorporé más harina. Por el tamaño del bollo, supongo que habrán sido unas cinco o seis tazas.

El bollo tiene que quedar fácil de amasar, sin pegotearse.

Lo dejan levar unas horas, tapado, vean qué lindo quedó:

Luego amasan el bollo y dan forma a los panes cerrando en tres partes ¨cosidas¨ abajo y doblando y ¨cosiendo¨ los extremos hacia abajo. Los pincelé con ketchup mezclado con agua y los corté en diagonales.

Dejar levar unas dos horas. Cocinar a temperatura media baja, 450o F sobre papel antiadherente o con la fuente aceitada, hasta que se vean dorados y se sientan huecos al golpearlos.

Acá ven cómo quedó la miga. El color se ve amarillento porque era de noche y saqué la foto con flash, pero a la luz del día, se ve rosado.

Y lo que más nos gustó a todos, unas rodajas con manteca, queso y ajo picado tostadas al horno.