Flan casero de ananá/piña/pineapple

Esta receta la tomé del blog de Concha La cocina de Concepción. Confieso que es la primera vez que hago flan casero, por la simple razón que las veces que lo he comido, he sentido grumos, y tanto los grumos en la leche, como en el yogur me dan náuseas, y mejor ni recuerdo la nata, así como se forma en la leche hervida, es terrible para mí. Sin embargo, la receta se veía tan tentadora, que pensé, voy a darle una oportunidad. Lo que no esperaba es que me iba a gustar, que iba a ser un éxito en casa (cuando siempre consumimos el flan Royal de vainilla con caramelo casero, ninguna otra marca o gusto). Y no encontré grumos! Creo que el éxito reside en haber usado la licuadora y leche condensada.

Como sea, la receta es bien fácil. Preparé caramelo y lo vertí en un molde de flan.

Luego, puse 6 huevos en la licuadora con el ananá bien ESCURRIDO de una lata chica. Ahí dudé, porque Concha no aclara cuánto trae la lata en España, y por las dudas, puse 3/4 de una lata de 500 gr. Podría haberlo puesto todo, me dí cuenta luego de cocido. Lo licué en la opción más fina (se entiende?).

De ahí, lo pasé a un bol y le agregué, mezclando, una lata de leche condensada azucarada (también se consigue de la otra, pero sólo el ananá y la leche condensada darán el sabor dulce en la mezcla), más la misma lata con leche entera. Revolví un poco más, vertí la preparación en el molde, y lo cociné A BAÑO MARÍA por 45 min a horno moderado-bajo 400oF, Concha dice 40 min a 180o C.

Me preguntaba si me daría cuenta cuando estaría listo, y sí, la superficie se dora, como si fuera budín de pan, y se nota firme al tacto. Por supuesto se desmolda frío. Lo bueno, con respecto al comprado, es que es más denso,  no hay que esperar tantas horas para desmoldarlo, y no se rompe al cortarlo.

Lo que ven un poco desprolijo es que quisieron comerlo durante el almuerzo, y lo saqué antes de lo debido. En la foto siguiente, ven una porción con chocolate syrup