Buñuelos de espinaca

Dos atados de espinaca rinden como para unos 14 buñuelos, y dependiendo del tamaño.

Necesitaremos además, dos huevos pequeños, un buen chorro de leche, sal, nuez moscada (nut meg), un puñado de queso rallado y harina, si es leudante mejor, sino usamos multipurpose (harina común) y le agregamos una cucharita de polvo para hornear (baking powder).

Se hierve la espinaca. La exprimimos muy bien y picamos. En un bol, colocamos la espinaca, los huevos batidos, un chorro de leche, el queso, los condimentos. Luego la harina, en forma de lluvia, seguimos revolviendo para evitar grumos. Para la harina, no especifiqué cuanto, porque dependerá de la cantidad de leche y huevo. Aconsejo no poner demasiada leche, porque la consistencia debe quedar como una pasta, y si los buñuelos necesitan más harina, quedarán pesados. En la foto del bol, vemos el resultado de un atado y medio de espinaca, y me consumió un solo huevo y unas 4 cuch. de harina.

Con una cuchara, tomamos porciones de pasta, las freímos en aceite, dando vueltas para que se doren. No los hagan muy grandes, porque tal vez adentro les queden un poco crudos. Vamos sacando y escurriendo sobre papel absorbente.

Consejo: estos buñuelos se hacen en el momento. No guarden la mezcla (sin harina) de un día para otro, porque la espinaca largará agua y necesitarán más harina. Los buñuelos de ciboulette, por ejemplo, pueden ser preparados en dos días, siempre que la harina la agreguemos al final.